La historia antigua nos recuerda que las espadas formaban parte de las más célebres armas de los guerreros que forjaron las crónicas y narraciones más importantes, y que ellos, junto a los filósofos, matemáticos y políticos romanos, egipcios árabes y vikingos nos han aportado parte de nuestro legado cultural.
Por eso son tan conocidas estas espadas. Ya sean las gladius o las spathas romanas, vienen a nuestra memoria los legionarios y centuriones romanos o los gladiadores.
Las potentes espadas vikingas con su tradicional empuñadura tan reconocible para los expertos en espadas y que sabemos les permitían a estos aguerridos hombres un control rápido y eficaz de su arma.
Los egipcios con sus espadas casi siempre curvas diseñadas para cortar con las hojas punzantes y sus característicos motivos faraónicos.
Los árabes, hombres de ciencia, religión y batallas con sus preciosas espadas tipo cimitarras, kabilas, jinetas y alfanjes nos han legado esas preciosas y eficaces armas.