Una buena espada de entrenamiento y la práctica constante son la clave para adquirir las habilidades necesarias para el buen manejo de estas preciosas armas blancas. Y si te ayuda un profesor experimentado, mejor que mejor. Hay diversos estilos y escuelas en la lucha de espadas. Y ni qué decir el diverso tipo de espadas funcionales, de combate, de prácticas o de entrenamiento como suelen llamarse. Asegúrate de luchar únicamente con personas que estén utilizando espadas compatibles.
Desenvaina tu espada antes de entrar en combate. Toma más tiempo desenvainar una espada que recibir un golpe. Por otro lado, si tu espada y funda permiten realizar un desenfunde rápido, y si lo practicas, éste puede ser un excelente ataque sorpresa.
¡Relájate! Es perfectamente entendible estar tenso en un combate, pero debes hacer todo tu esfuerzo para conservar la calma y regular tu respiración. Mantén tu cuerpo equilibrado para que puedas atacar o defender sin recibir golpes.
Siempre deja tus pies separados a la misma altura que tus hombros y cuando te muevas, muévete de un modo en que tus piernas queden separadas. Nunca tengas los pies cerca el uno del otro. Una postura firme y una apropiada ubicación de los pies son la clave para el equilibrio.
Mantén tu espada lista de forma extendida y alejada a una distancia cómoda de tu cuerpo.
