El caballero medieval era un guerrero a caballo, generalmente de noble cuna, que prestaba el juramento de ser valiente, leal, cortés y de proteger a los indefensos; lo que se denominaba el código de caballería.
Los caballeros medievales podía pertenecer a una orden militar o a una orden de caballería. La espada era el arma personal y preferida con la que un caballero se enfrentaba a otro y era bendecida por un sacerdote, con la hoja y la empuñadura se hacía una forma de cruz. La espada era acompañada de armas cortas como los cuchillos, los puñales o las dagas, solas o en combinación con las espadas.
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