El 28 de marzo de 1844 se crea oficialmente y por Real Decreto la Guardia Civil como un “cuerpo especial de fuerza armada de Infantería y Caballería”, bajo la dependencia del Ministerio de la Gobernación y con “la denominación de Guardias Civiles”. A los efectos de organizar esta nueva fuerza se comisiona al mariscal de campo D. Francisco Javier Girón y Ezpeleta, II Duque de Ahumada.
El reto que se le plantea al Duque de Ahumada es poner en marcha una institución que proteja eficazmente las personas y las propiedades. Para ello, propone que la Guardia Civil sea una organización basada en la calidad por lo que recomienda cubrir la plantilla paulatina y selectivamente para garantizar la excelencia del personal. Suya es la siguiente cita: “servirán más y ofrecerán más garantías de orden cinco mil hombres buenos que quince mil, no malos, sino medianos que fueran.”
Desde los inicios de la Guardia Civil, la honradez y la seriedad en el servicio son sus líneas de comportamiento, presididas por su normativa más famosa donde se lee: “el honor es la principal divisa del guardia civil; debe, por consiguiente, conservarlo sin mancha. Una vez perdido, no se recobra jamás”.
VER SABLE OFICIAL GUARDIA CIVIL, AÑO 1844