Las espadas diabólicas hacen referencia al diablo o relacionadas con él. En el cristianismo, el Diablo es un ser sobrenatural maligno y tentador de los hombres; en el Nuevo Testamento se identifica a este ser con el Satán hebreo, con la serpiente del Génesis y con el gran dragón del Apocalipsis, todos como un solo personaje.
Un personaje denominado Satán fue descrito dentro de los muchos evangelios de los primeros cristianos como el enemigo cósmico del hombre y el tentador de Jesús.
Se desarrolló mucho más en amplitud y poder que el portador de Armagedón y Apocalipsis según está caracterizado dentro del Libro de la Revelación.